Recreativo, los que van a morir, te saludan.
Y es que imagino que cuando aquellos salían a la arena no pensaban en su técnica de lucha o con la espada, sino en sobrevivir. Y eso es lo que le sucedió al Recre ayer, que por momentos pareció olvidar algunos fundamentos futbolísticos para confiarlo todo, al instinto de supervivencia. Cuando el Recreativo marcó ( demasiado pronto, lo primero que pensé ), fue como si en la incertidumbre de la tarde se dibujase una gran certeza: qué mal lo vamos a pasar. Y según caían los minutazos, junto con la pregunta "cuanto falta" otra, nos hacíamos: ¿ cómo es posible que el San Fernando, con el buen gusto que tiene con la bola, esté donde está? La respuesta la encontrábamos al final del encuentro: le falta el gol. Ellos calleron jugando y nosotros vivimos creyendo , cada deseo de cada alma allí presente contó; yo, por ejemplo, cada vez que quería que la pelota no acabase en quien más miedo me daba de ellos, el entrenador del San Fernando lo cambiaba.. De nada habría servido la entrega...