EuroHuelva 2018, Sara Peñalver


                "El cielo azul, azul, azul, asaeteado de mis ojos en arrobamiento, se levanta, sobre los almendros cargados, a sus últimas glorias. Todo el campo, silencioso y ardiente, brilla. En el río, una velita blanca se eterniza, sin viento. Hacia los montes la compacta humareda de un incendio hincha sus redondas nubes negras."

                Este año los aficionados al Ies La Orden hemos olvidado aquella pregunta que solíamos hacernos, "¿vienen los ingleses?", y es ha parecido claro desde el principio, que Rinconada dispondría de todas sus estrellas en cualquier momento de la competición; este año, la pregunta era otra, "¿juegan los hermanos?..." Ya tenía Pitius grandes volantistas, pero contando con Sara y Kike Peñalver el objetivo de la temporada no es mantener la categoría, sino pintarle la cara a cualquiera. Bárbaro, por ejemplo, el encuentro entre Sara Peñalver y Telma Santos en liga regular. Y hablando de Sara...

                Comienza el torneo con un bye, como las cabezas de serie, para medirse en 1/16 a Agnes Korosi, o a Lianne Tan. La mayor dificultad que tiene un Campeonato de Europa es que muchas grandes jugadoras, que saben que no tienen la menor oportunidad fuera de los límites del continente, lo marcan en el calendario como el gran objetivo, la gran cita donde lo darán y lo arriesgarán, todo aunque con ello sacrifiquen gran parte del resto de la temporada. Así que para para vivir, hay que morir, en la pista. Y sea quien sea la oponente de Sara, se lo va a poner difícil. Lianne Tan tiene una carrera hecha en el circuito internacional, una jugadora experta que sabe mandar en los partidos y que es, además, muy rápida; Korosi (a la que Carolina no hizo parecer tan buena en el último Europeo por equipos), creo que le vendría peor, pero estoy seguro de que si Sara Peñalver es capaz de competir a su máximo nivel, tendrá su oportunidad. La multitud de recursos de que dispone la convierten en presente y futuro de nuestro bádminton. Si “la hace”, en cuartos se las vería, probablemente, con Natalia Koch Rohde, y no creo que nada pudiese motivarla más que el hecho de saber que la siguiente, sería Carolina.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Un recre contra otra recre

El Recre se hace pequeño en Málaga

Mis variaciones sobre Don Giovanni, de Mozart